El mezcal es una bebida alcohólica que se elabora a partir del agave, comúnmente conocido como maguey. Se elabora de manera tradicional cuyo método ha pasado de generación en generación. El mezcal se hace de los corazones o piñas de los agaves, que se cosen en leña, luego se muele y se deja fermentar, y después se destila con alguno de los métodos permitidos. Aunque lo ideal es consumir el mezcal por sí solo, mezclarlo con frutas y hierbas se ha hecho muy popular entre los consumidores.

¿Qué es el Mezcal?

El mezcal es una bebida alcohólica que ha existido desde 1600 pero que apenas en 1970 se ha reconocido legalmente para su elaboración y consumo. Hay muchos tipos diferentes de Mezcal, pero todos se destilan del jugo fermentado de la planta de agave. El proceso completo para la elaboración de mezcal JOVEN tarda hasta cinco semanas y si hay que reposarse, se hace en barricas de roble hasta por dos años. El mezcal se elabora de muchas maneras diferentes, pero la más popular es el proceso tradicional o ancestral, que es el más caro ya que todo el proceso es a mano y se obtienen lotes muy pequeños. El proceso tradicional es también, el único proceso que resalta los sabores y aromas únicos del Mezcal.

¿Cuáles son los diferentes tipos de Mezcal?

Hay muchos y diferentes Mezcales, y cada uno tiene su propio aroma y sabor que los hace únicos. Cada Maestro Mezcalero tiene su propia receta que ha heredado de sus ancestros, que junto con los agaves que muchas veces son silvestres, y las características del campo de cada lugar, hacen que el mezcal tome sus aromas y sabores principalmente de los procesos de cocción y fermentación, sin dejar a un lado el proceso de destilación, en particular de aquellos que utilizan ollas de barro. Existe una gran influencia entre los Maestros Mezcaleros según la región en donde trabajan y así, se reconocen por ejemplo los mezcales de Santiago Matatlán y Santa Catarina Minas en Oaxaca, que guardan un proceso casi idéntico entre los Maestros del lugar.

¿Cómo disfrutar del Mezcal?

El mezcal es un tipo de bebida alcohólica que se elaboraba tradicionalmente a partir del agave. En México, tradicionalmente se sirve en pequeñas ollas de barro, jícaras y en el vaso estriado “de la cruz”. Se recomienda usar vasos con la boca más amplia que la de los tradicionales “shots” de tequila, para apreciar mejor los aromas del mezcal al estarlo saboreando. Aunque la tradición es tomarlo solo, acompañado de sales de gusano y chapulines fritos, ahora se utiliza mucho para preparar exóticas bebidas con frutas, hierbas y otros licores que han tenido mucha aceptación entre los consumidores. La tradición dice que hay que tomar el mezcal a temperatura ambiente y que incluso en climas calientes, tomar mezcal regula la temperatura del cuerpo y ayuda a soportar el calor. Deberías probar Mezcal si te gusta el tequila, el whisky, y otros licores.